Su tarde en un apartamento parisino le ofrece un entorno relajado y auténtico para la clase de elaboración de postres. Tras conocer a su anfitrión en el centro de la ciudad, disfrute de un relajado paseo de cinco minutos hasta su apartamento privado y luego póngase a cocinar.

Su anfitrión, un chef profesional, tiene todos los utensilios y el equipo que pueda necesitar. Póngase el delantal y descubra los secretos de la elaboración de ricos postres típicos franceses, los favoritos a nivel mundial.

Los postres creados durante su clase de cocina en París pueden variar, pero puede estar seguro de todo lo que comerá será delicioso. Algunos ejemplos de postres y pasteles típicos franceses que puede que haga son madeleines (galletas de mantequilla con forma de concha) de limón y tarta Tatin (tartaletas de manzana caramelizada al revés). Además, puede que haga un postre o dos que sean habituales fuera de Francia, como, por ejemplo, un delicioso fondant de chocolate o piñas asadas al ron.

Bajo la supervisión continua de su anfitrión, elabore dos o tres postres diferentes, mientras charla sobre la pastelería, la cocina y el dulce. Después de crear los platos, siéntese, relájese y coma. Tendrá alrededor de 45 minutos para disfrutar de un postre, con su elección de té, café o chocolate caliente.

Después de disfrutar una clase de cocina en uno de las capitales culinarias del mundo, estará preparado para mostrar sus refinadas habilidades en la cocina a sus amigos y familiares cuando vuelva a casa.